En verano es muy importante regar bien nuestras plantas ya que, como nosotros, necesitan hidratarse más durante los meses de calor. Os explicamos los 4 consejos básicos para realizar un buen riego en verano.
1- Riega en profundidad:
Al contrario de lo que puede parecer, en verano no se necesita un riego muy frecuente. Si que debemos aumentar el riego pero, en general, lo más recomendable es regar entre dos y tres veces semanales pero aumentando la cantidad de agua. Así, las plantas crean sus propias reservas de agua y pueden combatir mejor la calor.
2- Riega a primera hora de la mañana o una vez se haya puesto el sol:
El mejor momento para regar es a primera hora de la mañana o una vez ya se ha puesto el sol. Así evitamos que el sol pueda quemar las hojas y ayudamos a que el sustrato retenga mejor la humedad, ya que durante las horas de más calor, el agua se evapora con más facilidad.
3- No mojes las hojas
Mojar las hojas en el momento del riego puede provocar enfermedades a la planta y, si el sol toca a las hojas, quemarlas.
4- Controla la humedad
Una humedad constante es buena para evitar la deshidratación de las plantas pero lo importante es no pasarnos con el agua de riego y procurar que las plantas cuenten con un buen drenage.
En el momento de regar el césped debemos evitar el encharcamiento ya que una capa de agua dificulta la respiración de las raíces.
*Ten en cuenta que…
Las plantas en macetas pequeñas no disponen de tanta reserva de agua y, por lo tanto, necesitaran un riego más frecuente.
Cuando marches de vacaciones, las plantas siguen necesitando agua. ¡Busca soluciones para poder regarlas! Una buena opción, sobretodo para las plantas de interor y terrazas y balcones, es usar geles o conos de argila dosificadores.